En seguida nos damos cuenta de que el cielo es de color azul. ¿Pero alguna vez te has preguntado por qué?
Muchas otras personas inteligentes, también se lo han preguntado… ¡Y les ha tomado mucho tiempo averiguar cómo y por qué!
La luz del Sol se ve blanca, pero en realidad está compuesta por todos los colores del arcoíris.
Cuando la luz blanca pasa por un prisma, queda separada en todos sus colores. Un prisma es un cristal que tiene una forma especial.
Si has visitado La tierra de las ventanas mágicas, sabrás que la luz que vemos es solo una parte diminuta de todos los tipos de energía lumínica que hay en el universo y alrededor de todos nosotros.
Igual que en el caso de la energía que circula en las ondas oceánicas, la luz también viaja en ondas. Parte de la luz viaja en ondas breves y cortas, y otra parte lo hace en ondas largas y de larga duración. Las ondas azules son más cortas que las rojas.
Toda la luz viaja en línea recta, a menos que encuentre un objeto a su paso y experimente alguno de los siguientes cambios:
-
Reflejarse, como sucede con los espejos
-
Doblarse, como con los prismas
-
Dispersarse, como con las moléculas de los gases de la atmósfera
La luz del Sol llega a la atmósfera terrestre y se dispersa en todas direcciones al encontrarse con los gases y las partículas del aire. La luz azul se esparce en todas direcciones porque se topa con las diminutas moléculas presentes en la atmósfera terrestre. Además, la luz azul se dispersa más fácilmente que otros colores porque está compuesta de ondas cortas y más pequeñas. Este es el motivo por el que vemos el cielo azul la mayoría del tiempo.
Cerca del horizonte, el cielo se vuelve de un color azul pálido o blanco. La luz del Sol que llega desde la parte más baja del cielo ha pasado por más aire que la luz que nos llega por arriba. Cuando la luz del Sol pasa a través de tanto aire, las moléculas del aire dispersan y redispersan la luz azul varias veces y en muchas direcciones.
También la superficie de la Tierra ha reflejado y dispersado la luz. Todo esto mezcla los colores otra vez, y por eso vemos más blanco y menos azul.
¿Qué hace que la puesta del Sol sea roja?
A medida que el Sol va bajando en el cielo, su luz pasa por más partes de la atmósfera hasta alcanzarnos. Así, más parte de la luz azul queda dispersada, lo que hace que la luz roja y amarilla pase directamente y podamos captarla con los ojos.
¿El cielo también es azul en otros planetas?
¡Todo depende de lo que haya en la atmósfera! Por ejemplo, Marte tiene una atmósfera muy delgada hecha principalmente de dióxido de carbono y llena de partículas finas de polvo. Estas partículas finas dispersan la luz de manera diferente a los gases y partículas en la atmósfera de la Tierra.
Las fotos de los rovers y aterrizadores de la NASA en Marte nos han demostrado que, al atardecer, en realidad es lo contrario de lo que experimentarías en la Tierra. Durante el día, el cielo marciano adquiere un color anaranjado o rojizo. Pero a medida que el Sol se pone, el cielo alrededor del Sol comienza a tomar un tono azul grisáceo.